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"Hoy me quedo, pero no descarto irme"
El Muñeco mostró su angustia tras el asalto sufrido con su familia y confesó que hasta se "planteó" la posibilidad de dejar la Argentina.
Uno se hace replateos, pero yo volví para quedarme. Porque tenía ganas de estar en el país, porque quería jugar en River y terminar mi carrera acá. En esos momentos de angustia, cuando uno piensa en su familia, en sus hijos, te hacés muchas preguntas. Y yo me hice demasiadas..."
La mirada angustiada de Marcelo Gallardo vaticina un anuncio que lo ahoga. Una reflexión sincera, casi una confesión de quien vivió una pesadilla el último fin de semana junto a su familia, cuando fue asaltado por un grupo de delincuentes en su casa de Martínez. Aún golpeado por el hecho, el Muñeco se reencontró con los micrófonos y sentenció... "Tengo ganas de seguir acá. Hoy me quedo, pero no descarto irme. Después de lo que ocurrió, los planteos familiares fueron muchos".
-¿Qué significa el "no descarto nada"?
--Cuando hablo de hacer replanteos, es tratar de manejar esto con tranquilidad, de darle calma a la familia, a mi señora, a mis hijos... De que hay que seguir mirando para adelante. Y si no es así, más adelante me replantearé otra situación. Por el momento, no.
-¿Tu familia evaluó la posibilidad de irse de la Argentina?
-Cuando vivís momentos así, sí. Manejás algunas alternativas, pero ya está, ya está... Ojalá que no vuelva a pasar.
-¿Sentís que estás más expuesto por ser una persona pública?
-Hay muchas personas que no son públicas que también pasan por esto. Todos estamos expuestos. Hay una realidad que se está viviendo en el país, que es el tema de la inseguridad. Uno a veces mira de reojo todas las cosas que están pasando y se pregunta, "¿cuándo me va a tocar a mí?". Después de lo que viví, uno se replantea muchísimas cosas, quedás muy dolido, con una sensación de angustia terrible... Trataré de pasar estos momentos de la mejor manera tratando de olvidar lo que pasó, nada más.
Marcelo Gallardo habla más pausado que de costumbre, como si masticara el concepto de cada palabra, de cada oración. Agradece a quienes lo llamaron en horas difíciles, cuenta que habló con algunas autoridades pero evita profundizar los detalles y busca mostrarse entero, aunque a veces se le anuda la garganta cuando retoma el relato... "El hecho de venir a entrenarme y con ganas, de tratar de brindarme al máximo es algo que está dentro de mí, más allá del momento vivido. Tengo el entusiasmo y las mismas ganas de entrenarme que tenía antes de lo ocurrido. Pasé un momento de angustia terrible, y que todavía está un poco adentro", explicó tras la práctica.
En el exterior, Gallardo vistió las camisetas del Monaco, del PSG y del DC United norteamericano. Y hoy, al menos por el momento, avisó que seguirá en Núñez: "Decidí volver a entrenarme porque puedo abstraerme de lo que sucedió. Agradezco que no haya pasado nada grave. Pero si hubiese arriesgado la vida de alguno de mis familiares, hoy por ahí no estoy acá", cerró.
El Muñeco mostró su angustia tras el asalto sufrido con su familia y confesó que hasta se "planteó" la posibilidad de dejar la Argentina.
Uno se hace replateos, pero yo volví para quedarme. Porque tenía ganas de estar en el país, porque quería jugar en River y terminar mi carrera acá. En esos momentos de angustia, cuando uno piensa en su familia, en sus hijos, te hacés muchas preguntas. Y yo me hice demasiadas..."
La mirada angustiada de Marcelo Gallardo vaticina un anuncio que lo ahoga. Una reflexión sincera, casi una confesión de quien vivió una pesadilla el último fin de semana junto a su familia, cuando fue asaltado por un grupo de delincuentes en su casa de Martínez. Aún golpeado por el hecho, el Muñeco se reencontró con los micrófonos y sentenció... "Tengo ganas de seguir acá. Hoy me quedo, pero no descarto irme. Después de lo que ocurrió, los planteos familiares fueron muchos".
-¿Qué significa el "no descarto nada"?
--Cuando hablo de hacer replanteos, es tratar de manejar esto con tranquilidad, de darle calma a la familia, a mi señora, a mis hijos... De que hay que seguir mirando para adelante. Y si no es así, más adelante me replantearé otra situación. Por el momento, no.
-¿Tu familia evaluó la posibilidad de irse de la Argentina?
-Cuando vivís momentos así, sí. Manejás algunas alternativas, pero ya está, ya está... Ojalá que no vuelva a pasar.
-¿Sentís que estás más expuesto por ser una persona pública?
-Hay muchas personas que no son públicas que también pasan por esto. Todos estamos expuestos. Hay una realidad que se está viviendo en el país, que es el tema de la inseguridad. Uno a veces mira de reojo todas las cosas que están pasando y se pregunta, "¿cuándo me va a tocar a mí?". Después de lo que viví, uno se replantea muchísimas cosas, quedás muy dolido, con una sensación de angustia terrible... Trataré de pasar estos momentos de la mejor manera tratando de olvidar lo que pasó, nada más.
Marcelo Gallardo habla más pausado que de costumbre, como si masticara el concepto de cada palabra, de cada oración. Agradece a quienes lo llamaron en horas difíciles, cuenta que habló con algunas autoridades pero evita profundizar los detalles y busca mostrarse entero, aunque a veces se le anuda la garganta cuando retoma el relato... "El hecho de venir a entrenarme y con ganas, de tratar de brindarme al máximo es algo que está dentro de mí, más allá del momento vivido. Tengo el entusiasmo y las mismas ganas de entrenarme que tenía antes de lo ocurrido. Pasé un momento de angustia terrible, y que todavía está un poco adentro", explicó tras la práctica.
En el exterior, Gallardo vistió las camisetas del Monaco, del PSG y del DC United norteamericano. Y hoy, al menos por el momento, avisó que seguirá en Núñez: "Decidí volver a entrenarme porque puedo abstraerme de lo que sucedió. Agradezco que no haya pasado nada grave. Pero si hubiese arriesgado la vida de alguno de mis familiares, hoy por ahí no estoy acá", cerró.
