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Como seguramente no me voy a conectar de aquí a la semana que viene por que salgo de viaje, les quería desear a todos un "Feliz día de la primavera, del estudiante y de los novios!" , etc etc...
Y disfruten en el finde ^^.
PD: esto va como para rellenar el tema :
El día de la primavera simboliza la renovación de la naturaleza y la creatividad del espíritu humano. Todos los 21 de septiembre la juventud es protagonista. Y ya es tradición el festejo con espectáculos en vivo de todo tipo y al aire libre. La consigna es reunirse con amigos, pasar un día de picnic y aprovechar los espacios abiertos.
Una historia de primavera:
el rapto de Perséfone
Desde los tiempos más remotos, el hombre, cuando no puede comprender el mundo externo que lo rodea, crea representaciones míticas. Así, la humanidad ha llegado ha mitificar desde la salida y la puesta del sol hasta los fenómenos atmosféricos, el crecimiento de las plantas, el nacimiento y la muerte. La primavera es la estación del renacimiento... así lo entendieron la gran mayoría de las religiones antiguas y, a partir de ello, levantaron muchos de sus mitos. En este contexto, la primavera es vista como lo muerto que renace. Una vez más ocurre el milagro: de los arboles deshojados renacen nuevos brotes y, una vez más, hay cosecha, es decir, vida.
Mahoma decía: "No hay gota en los mares, ni fruto en los árboles, ni planta en la tierra que no tenga en cada semilla un ángel que cuide de ella". La naturaleza está entonces ligada a lo sagrado y protegida por los guardianes de dios para que al hombre no le falte el sustento. Para algunos pueblos eslavos y escandinavos, por ejemplo, los templos consagrados a sus dioses eran bosques, lagos y árboles sagrados, pero todos celebraban festivales que podían durar semanas porque para todos los pueblos la primavera siempre era algo festivo.
Las diosas Démeter(1) y Perséfone(2) representaban para los pueblos de la antig¼edad los poderes de la naturaleza, su transformación y la emergencia cíclica. En la antigua Grecia, el primer día de la primavera era el día en que Perséfone(2), prisionera bajo tierra durante seis meses, volvía al regazo de Deméter(1), su madre.
Cuenta Homero que en el sureste de Europa hubo un tiempo en el que reinaba la eterna primavera. La hierba siempre era verde y espesa y las flores nunca marchitaban. No existía el invierno, ni la tierra yerma, ni el hambre. La artífice de tanta maravilla era Démeter(1), la cuarta esposa de Zeus(3). De este matrimonio nació Core, luego llamada Perséfone(2). Se trataba de una hermosa joven adorada por su madre que solía acercarse a un campo repleto de flores a jugar. Un día, pasó por allí el terrible Hades(4) con su temible carro tirado por caballos. Se encandiló con Perséfone(2) y la raptó para llevarla al subsuelo, su territorio. Deméter(1), al no encontrar a su hija y con una antorchas en cada mano, emprendió una peregrinación de nueve días y nueve noches. Al décimo día el Sol, que todo lo ve, se atrevió a confesarle quién se había llevado a su hija. Irritada por la ofensa, Démeter(1) decidió abandonar sus funciones y el Olimpo. Vivió y viajó por la tierra. Esta se quedó desolada y sin ningún fruto ya que, privada de su mano fecunda, se seca y las plantas no crecen. Ante este desastre Zeus(3) se vio obligado a intervenir pero no pudo devolverle la hija a su madre. Es que Perséfone(2) ya había probado el fruto de los infiernos (la granada) y por eso le era imposible abandonar las profundidades y regresar al mundo de los vivos. Sin embargo, se pudo llegar a un acuerdo: una parte del año Perséfone(2) lo pasaría con su esposo y, la otra parte, con su madre.
Lo que este mito indica es que cuando Perséfone(2) regresa con su madre, Démeter(1) muestra su alegría haciendo reverdecer la tierra, con flores y frutos. Por el contrario, cuando la joven desciende al subterráneo, el descontento de su madre se demuestra en la tristeza del otoño y el invierno. Así se renueva anualmente el ciclo de las estaciones y así explicaban los griegos la sucesión de ellas: el otoño y el invierno son tristes y oscuros como el corazón de Deméter(1) al estar separada de su hija. La alegría y la serenidad retornan cuando vuelve con ella, es decir, cuando comienza la primavera.
Días blancos de primavera
Días blancos de primavera,
despertar con el verde que brotó,
ya viene el perfume a darte un soplo veloz.
Días blancos de primavera,
este azul va a llevarse tu dolor
más lejos que el frío, a algún helado rincón.
Días sin paz, ya no habrá más días sin paz,
si ya te ahogaste de llorar,
si ya lavaste a nuevo el alma,
vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar.
Días blancos de primavera,
flor abierta que todo espera dar (dar, dar)
al pedirte apenas que la quieras mirar (quererla mirar).
Vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar
porque el invierno volverá.
Hoy día es tiempo de tibieza,
d ía de sol sea este hoy día de sol.
No insistas en mirar atrás
que un día, pronto, el día se helará.
Cada día de primavera,
cada pétalo lleva una canción (lleva una canción de amor)
que preparó cuando el frío ahogaba su voz (cuando el sol se heló).
Día de sol sea este hoy día de sol,
si ya te ahogaste de llorar (basta de llorar),
si ya lavaste a nuevo el alma,
d ías de amar, días de dar, días de amar.
Días blancos de primavera,
guarda el fruto este blanco azahar de hoy.
Que brille la vida entera en primavera,
dentro y fuera vuelve el sol.
Pedro Aznar
-------------
21 DE SEPTIEMBRE - Día del estudiante
El estudiante, esperanza de los pueblos
En coincidencia con el inicio de la primavera, cada 21 de septiembre los estudiantes duplican sus motivos para celebrar y renovar su tan noble y necesaria actividad.
La institución del Día del Estudiante en coincidencia con el Día de la Primavera no es un mero capricho del destino ni del azar, sino una justificada unificación de dos fechas con un mismo marco: la celebración por la renovación y la creatividad, de la naturaleza y del espíritu humano.
Y como no podía ser de otro modo, en este día la juventud es protagonista con actividades de todo tipo, en su mayoría al aire libre como guiño de complicidad con la estación que se inicia.
Detrás de las celebraciones y el jolgorio, sin embargo, subyace una cuestión más profunda que no debe perderse de vista: la renovación de un compromiso, de una responsabilidad asumida con uno mismo, con el país y con las generaciones venideras, en tanto y en cuanto el estudiante representa, desde su propia concepción y por sus objetivos y razón de ser, el futuro del pueblo que lo está educando.
En su día, que las celebraciones del presente no tapen el compromiso con el futuro.
Históricamente, a los estudiantes se les han dedicado numerosas poesías y canciones. A modo de homenaje, es propicio compartir una canción que simboliza el espíritu de este día. Está escrita por Francisco García Jiménez, Ernesto Galeano y Carlos Guastavino, y dice así:
Canción del Estudiante
¡Estudiantes!... Alcemos la bandera
que ilustraron los próceres de ayer
y florezca a sus pies la primavera
del amor renovado en nuestro ser.
¡Y echen a vuelo el nombre de estudiantes,
en bronces de romántica emoción,
los que lo son, los que lo fueron antes;
los que por suerte, tienen de estudiantes
para toda la vida el corazón!
Brisa que riza el Plata, zonda de andino tope,
tibio aliento del norte, racha del Sur...
¡Lleven los cuatro vientos, en su galope,
esta canción que canta la juventud!
Almas y voces juntas, manos entrelazadas;
honda fe de argentinos y un mismo afán;
ansias de noble ciencia nunca saciadas,
ojos puestos en rutas, en rutas del más allá.
--------------
Día de los novios: rosas, desayunos, serenatas, cena y clasificados
Los regalos que se imponen al momento de celebrar
La palabra "novio" fue mutando con las épocas. Las abuelas de hoy tenían ayer un "festejante", una "simpatía" o un "filo". Y hasta hace muy poco las parejas, al unirse, se arreglaban. Pero los actuales adolescentes prácticamente no conocen esos términos; ellos dicen simplemente que "salen" con su "chico" o su "chica". Más allá de las formas, los enamorados de todas las edades festejarán hoy en privado el Día de los Novios y se regalarán todo tipo de presentes. Entre los más comunes, flores y bombones, cena, ropa, tarjetas, mails, serenatas, una visita por el motel o simplemente besos. Pero también está la opción más pública del aviso clasificado: algunos declaran amores platónicos y otros aprovechan la ocasión para un pase de factura. "En estos diez años de convivencia -le dedica Beatriz a Ricardo Rubén en La Capital de hoy- sos buen novio, buen marido, te falta ser buen compañero. Feliz Día, te quiero".
El 14 de febrero es el Día de los Enamorados, por conmemorarse la fecha en que murió San Valentín, el patrón de los enamorados. Pero no se sabe a ciencia cierta por qué hoy se celebra el Día de los Novios. No obstante, los comerciantes aseguran que ya es tradición que las parejas se obsequien presentes en esta fecha.
Las flores son "un clásico". Y entre ellas, las rosas rojas, que simbolizan la pasión y el amor, llevan la punta. Así lo sostienen desde Flor Express (Córdoba 2921), donde se habían registrado ayer varios pedidos de media docena de rosas para llevar a domicilio. Las importadas se cotizan a 40 pesos las seis unidades. Y aunque aunque siempre se supo que las rosas amarillas significaban "desprecio", hubo más de un encargo. "Están de moda, al igual que las blancas, que representan la pureza", aclararon desde la florería.
No obstante, hay opciones más económicas, como la de los ramos de iris (una flor similar a la orquídea) a 25 pesos.
Desde la florería Lilas (Santiago 990) también aseguran que las rosas rojas son las que tienen más salida en esta fecha amorosa, pero afirman que las silvestres lirium y fresias no se quedan atrás. Se consiguen ramos desde 25 pesos.
Las panaderías, en cambio, trabajan hoy a full en materia de desayunos y bombones. En las distintas sucursales de Nuria, por ejemplo, una bandeja para un cariñoso despertar va desde los 49 pesos en adelante. Y los bombones se cotizan a 38 pesos el kilo.
Salir a cenar siempre es un regalo romántico. Y no son pocos los restaurantes que han promocionado sus platos con descuentos o crearon climas especiales. Desde "Pascual R." (Córdoba 4599) publicitan un 20 por ciento de descuento de su carta que incluye especialidades de carnes en horno de barro y disco. En cambio, en Mujica (Vera Mujica 665) hoy ofrecerán primeros platos orientales y ambientarán el lugar con pétalos de rosas en el piso y velas.
Las parejas que paseen por el centro podrán escuchar las serenatas que a partir de las 18 entonarán en San Martín y Córdoba quienes se especializan en este género musical en el Centro Cultural Parque Alem.
En cambio, quienes opten por disfrutar de un turno en un motel (desde 39 pesos aproximadamente las dos horas) se encontrarán con sorpresas como las de los menúes especiales, flores y brujitas en Las Brujas. O los bombones con forma de corazón y también flores en el Gato Negro.
Y disfruten en el finde ^^.
PD: esto va como para rellenar el tema :
El día de la primavera simboliza la renovación de la naturaleza y la creatividad del espíritu humano. Todos los 21 de septiembre la juventud es protagonista. Y ya es tradición el festejo con espectáculos en vivo de todo tipo y al aire libre. La consigna es reunirse con amigos, pasar un día de picnic y aprovechar los espacios abiertos.
Una historia de primavera:
el rapto de Perséfone
Desde los tiempos más remotos, el hombre, cuando no puede comprender el mundo externo que lo rodea, crea representaciones míticas. Así, la humanidad ha llegado ha mitificar desde la salida y la puesta del sol hasta los fenómenos atmosféricos, el crecimiento de las plantas, el nacimiento y la muerte. La primavera es la estación del renacimiento... así lo entendieron la gran mayoría de las religiones antiguas y, a partir de ello, levantaron muchos de sus mitos. En este contexto, la primavera es vista como lo muerto que renace. Una vez más ocurre el milagro: de los arboles deshojados renacen nuevos brotes y, una vez más, hay cosecha, es decir, vida.
Mahoma decía: "No hay gota en los mares, ni fruto en los árboles, ni planta en la tierra que no tenga en cada semilla un ángel que cuide de ella". La naturaleza está entonces ligada a lo sagrado y protegida por los guardianes de dios para que al hombre no le falte el sustento. Para algunos pueblos eslavos y escandinavos, por ejemplo, los templos consagrados a sus dioses eran bosques, lagos y árboles sagrados, pero todos celebraban festivales que podían durar semanas porque para todos los pueblos la primavera siempre era algo festivo.
Las diosas Démeter(1) y Perséfone(2) representaban para los pueblos de la antig¼edad los poderes de la naturaleza, su transformación y la emergencia cíclica. En la antigua Grecia, el primer día de la primavera era el día en que Perséfone(2), prisionera bajo tierra durante seis meses, volvía al regazo de Deméter(1), su madre.
Cuenta Homero que en el sureste de Europa hubo un tiempo en el que reinaba la eterna primavera. La hierba siempre era verde y espesa y las flores nunca marchitaban. No existía el invierno, ni la tierra yerma, ni el hambre. La artífice de tanta maravilla era Démeter(1), la cuarta esposa de Zeus(3). De este matrimonio nació Core, luego llamada Perséfone(2). Se trataba de una hermosa joven adorada por su madre que solía acercarse a un campo repleto de flores a jugar. Un día, pasó por allí el terrible Hades(4) con su temible carro tirado por caballos. Se encandiló con Perséfone(2) y la raptó para llevarla al subsuelo, su territorio. Deméter(1), al no encontrar a su hija y con una antorchas en cada mano, emprendió una peregrinación de nueve días y nueve noches. Al décimo día el Sol, que todo lo ve, se atrevió a confesarle quién se había llevado a su hija. Irritada por la ofensa, Démeter(1) decidió abandonar sus funciones y el Olimpo. Vivió y viajó por la tierra. Esta se quedó desolada y sin ningún fruto ya que, privada de su mano fecunda, se seca y las plantas no crecen. Ante este desastre Zeus(3) se vio obligado a intervenir pero no pudo devolverle la hija a su madre. Es que Perséfone(2) ya había probado el fruto de los infiernos (la granada) y por eso le era imposible abandonar las profundidades y regresar al mundo de los vivos. Sin embargo, se pudo llegar a un acuerdo: una parte del año Perséfone(2) lo pasaría con su esposo y, la otra parte, con su madre.
Lo que este mito indica es que cuando Perséfone(2) regresa con su madre, Démeter(1) muestra su alegría haciendo reverdecer la tierra, con flores y frutos. Por el contrario, cuando la joven desciende al subterráneo, el descontento de su madre se demuestra en la tristeza del otoño y el invierno. Así se renueva anualmente el ciclo de las estaciones y así explicaban los griegos la sucesión de ellas: el otoño y el invierno son tristes y oscuros como el corazón de Deméter(1) al estar separada de su hija. La alegría y la serenidad retornan cuando vuelve con ella, es decir, cuando comienza la primavera.
Días blancos de primavera
Días blancos de primavera,
despertar con el verde que brotó,
ya viene el perfume a darte un soplo veloz.
Días blancos de primavera,
este azul va a llevarse tu dolor
más lejos que el frío, a algún helado rincón.
Días sin paz, ya no habrá más días sin paz,
si ya te ahogaste de llorar,
si ya lavaste a nuevo el alma,
vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar.
Días blancos de primavera,
flor abierta que todo espera dar (dar, dar)
al pedirte apenas que la quieras mirar (quererla mirar).
Vuelta a brillar, suelta tu mal, vuelta a brillar
porque el invierno volverá.
Hoy día es tiempo de tibieza,
d ía de sol sea este hoy día de sol.
No insistas en mirar atrás
que un día, pronto, el día se helará.
Cada día de primavera,
cada pétalo lleva una canción (lleva una canción de amor)
que preparó cuando el frío ahogaba su voz (cuando el sol se heló).
Día de sol sea este hoy día de sol,
si ya te ahogaste de llorar (basta de llorar),
si ya lavaste a nuevo el alma,
d ías de amar, días de dar, días de amar.
Días blancos de primavera,
guarda el fruto este blanco azahar de hoy.
Que brille la vida entera en primavera,
dentro y fuera vuelve el sol.
Pedro Aznar
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21 DE SEPTIEMBRE - Día del estudiante
El estudiante, esperanza de los pueblos
En coincidencia con el inicio de la primavera, cada 21 de septiembre los estudiantes duplican sus motivos para celebrar y renovar su tan noble y necesaria actividad.
La institución del Día del Estudiante en coincidencia con el Día de la Primavera no es un mero capricho del destino ni del azar, sino una justificada unificación de dos fechas con un mismo marco: la celebración por la renovación y la creatividad, de la naturaleza y del espíritu humano.
Y como no podía ser de otro modo, en este día la juventud es protagonista con actividades de todo tipo, en su mayoría al aire libre como guiño de complicidad con la estación que se inicia.
Detrás de las celebraciones y el jolgorio, sin embargo, subyace una cuestión más profunda que no debe perderse de vista: la renovación de un compromiso, de una responsabilidad asumida con uno mismo, con el país y con las generaciones venideras, en tanto y en cuanto el estudiante representa, desde su propia concepción y por sus objetivos y razón de ser, el futuro del pueblo que lo está educando.
En su día, que las celebraciones del presente no tapen el compromiso con el futuro.
Históricamente, a los estudiantes se les han dedicado numerosas poesías y canciones. A modo de homenaje, es propicio compartir una canción que simboliza el espíritu de este día. Está escrita por Francisco García Jiménez, Ernesto Galeano y Carlos Guastavino, y dice así:
Canción del Estudiante
¡Estudiantes!... Alcemos la bandera
que ilustraron los próceres de ayer
y florezca a sus pies la primavera
del amor renovado en nuestro ser.
¡Y echen a vuelo el nombre de estudiantes,
en bronces de romántica emoción,
los que lo son, los que lo fueron antes;
los que por suerte, tienen de estudiantes
para toda la vida el corazón!
Brisa que riza el Plata, zonda de andino tope,
tibio aliento del norte, racha del Sur...
¡Lleven los cuatro vientos, en su galope,
esta canción que canta la juventud!
Almas y voces juntas, manos entrelazadas;
honda fe de argentinos y un mismo afán;
ansias de noble ciencia nunca saciadas,
ojos puestos en rutas, en rutas del más allá.
--------------
Día de los novios: rosas, desayunos, serenatas, cena y clasificados
Los regalos que se imponen al momento de celebrar
La palabra "novio" fue mutando con las épocas. Las abuelas de hoy tenían ayer un "festejante", una "simpatía" o un "filo". Y hasta hace muy poco las parejas, al unirse, se arreglaban. Pero los actuales adolescentes prácticamente no conocen esos términos; ellos dicen simplemente que "salen" con su "chico" o su "chica". Más allá de las formas, los enamorados de todas las edades festejarán hoy en privado el Día de los Novios y se regalarán todo tipo de presentes. Entre los más comunes, flores y bombones, cena, ropa, tarjetas, mails, serenatas, una visita por el motel o simplemente besos. Pero también está la opción más pública del aviso clasificado: algunos declaran amores platónicos y otros aprovechan la ocasión para un pase de factura. "En estos diez años de convivencia -le dedica Beatriz a Ricardo Rubén en La Capital de hoy- sos buen novio, buen marido, te falta ser buen compañero. Feliz Día, te quiero".
El 14 de febrero es el Día de los Enamorados, por conmemorarse la fecha en que murió San Valentín, el patrón de los enamorados. Pero no se sabe a ciencia cierta por qué hoy se celebra el Día de los Novios. No obstante, los comerciantes aseguran que ya es tradición que las parejas se obsequien presentes en esta fecha.
Las flores son "un clásico". Y entre ellas, las rosas rojas, que simbolizan la pasión y el amor, llevan la punta. Así lo sostienen desde Flor Express (Córdoba 2921), donde se habían registrado ayer varios pedidos de media docena de rosas para llevar a domicilio. Las importadas se cotizan a 40 pesos las seis unidades. Y aunque aunque siempre se supo que las rosas amarillas significaban "desprecio", hubo más de un encargo. "Están de moda, al igual que las blancas, que representan la pureza", aclararon desde la florería.
No obstante, hay opciones más económicas, como la de los ramos de iris (una flor similar a la orquídea) a 25 pesos.
Desde la florería Lilas (Santiago 990) también aseguran que las rosas rojas son las que tienen más salida en esta fecha amorosa, pero afirman que las silvestres lirium y fresias no se quedan atrás. Se consiguen ramos desde 25 pesos.
Las panaderías, en cambio, trabajan hoy a full en materia de desayunos y bombones. En las distintas sucursales de Nuria, por ejemplo, una bandeja para un cariñoso despertar va desde los 49 pesos en adelante. Y los bombones se cotizan a 38 pesos el kilo.
Salir a cenar siempre es un regalo romántico. Y no son pocos los restaurantes que han promocionado sus platos con descuentos o crearon climas especiales. Desde "Pascual R." (Córdoba 4599) publicitan un 20 por ciento de descuento de su carta que incluye especialidades de carnes en horno de barro y disco. En cambio, en Mujica (Vera Mujica 665) hoy ofrecerán primeros platos orientales y ambientarán el lugar con pétalos de rosas en el piso y velas.
Las parejas que paseen por el centro podrán escuchar las serenatas que a partir de las 18 entonarán en San Martín y Córdoba quienes se especializan en este género musical en el Centro Cultural Parque Alem.
En cambio, quienes opten por disfrutar de un turno en un motel (desde 39 pesos aproximadamente las dos horas) se encontrarán con sorpresas como las de los menúes especiales, flores y brujitas en Las Brujas. O los bombones con forma de corazón y también flores en el Gato Negro.